domingo, 25 de agosto de 2013

Capítulo 33

En el capitulo anterior...

Bajé del coche después de despedirme con dos besos a Niall y fui hacia la ventanilla del conductor para hacer lo mismo con Harry.
Si alguna vez lo habéis hecho, conoceréis el problema del poco espacio de movimiento que permite la ventanilla, eso fue lo que causó algo que no hubiera deseado, el beso se desvió y los labios de Harry se acercaron peligrosamente para juntarse con la comisura de los míos.
Hicimos como si nada hubiera pasado, pero mi estomago decía lo contrario. Me dirigí rápidamente hacia a casa y vi como Harry y Niall se alejaban en el coche.
Y entonces, frente a la puerta de casa me descubrí a mi misma mordiéndome el labio a la vez que tocaba con la yema de mi dedo índice justo la parte donde mis labios habían tocado los de Harry, ese trozo donde ahora sentía como un cosquilleo agradable. Y eso no podía significar nada bueno.

Aparté esos pensamientos de la cabeza para sumirme en otros. La última vez que mis padres me habían llamado con una sorpresa... La noche no había terminado bien. Y entonces el miedo me recorrió de arriba abajo mientras introducía las llaves en la cerradura de la puerta.



Entré a casa, y cuál fue mi sorpresa al ver a un chico pelinegro de ojos color azul, con los brazos fuertes pero con unas feas marcas que seguirían ahí para siempre.
- ¡Andrew! ¿Qué haces aquí?
- Bueno- empezó a explicarme mi padre- tuve en cuenta lo que me dijiste. Y después de pensármelo un poco decidí llamarle. Al fin y al cabo, Fran no estaría aquí ahora si no hubiera sido por él. Ya está todo hablado. Va a hacer un curso intensivo con Álvaro y a partir de septiembre va a ser tu guardaespaldas. La casa de aquí al lado se vendía así que a partir de ahora él y su hermana vivirán allí. 
- Gracias papá- dije corriendo a abrazarle- Pero... ¿Y Álvaro?
- Álvaro va a vigilar a Fran y aunque le he insistido en que podía quedarse, al final él y Andrew han decidido que van a compartir la casa.
- ¿Y tu hermana Andrew?- reparé en que no estaba por ahí. 
- Selene se ha quedado en la nueva casa, han ido ella y tu madre a comprar ropa y ha acabado reventada. Gracias por todo Irene, de verdad, me has salvado la vida y nunca había visto a Sel tan feliz.- dijo antes de abrazarme.
- No me las des, tú salvaste la mía al ayudarnos con lo de Fran.


Era media noche cuando me despertó un grito.
- ¡Ayuda! ¡Por favor que alguien me ayude!
Me senté en la cama abriendo la luz de la mesilla de noche para mirar la hora del despertador. Las dos de la madrugada. Me levanté suspirando medio dormida y salí al pasillo cuando me encontré a mi madre con el camisón de dormir.
- Otra vez- dijo.
- Si, otra vez, vete a dormir, ya me ocupo yo.
- Si quieres me quedo yo con él esta noche.
- No mamá, no hace falta, descansa que mañana trabajas, yo estoy de vacaciones.
- Gracias hija- me dio un beso en la frente y volvió a su habitación. Yo me dirigí a la de Fran para encontrármelo revolviéndose en la cama mientras gemía de dolor. Me senté a su lado y le acaricié la frente con el pulgar.
- ¡Fran!- susurré- ¡Fran despierta!- alcé un poco más la voz- Fran, es solo una pesadilla, estás en casa- le dije zarandeándole el brazo con cuidado.
- ¿Qué?- dijo él desorientado abriendo los ojos.
- Mira, estás en casa- le expliqué abriendo la luz de su mesita de noche- solo ha sido otra pesadilla.
- Me duele la pierna, ¿me puedes traer un calmante? por favor. 
- Claro, espérate unos minutos. 
Fui al baño y busqué la caja. Estaba vacía. Fui a informárselo a mi hermano y me dijo que en el salón había otra. Bajé al salón con cuidado de no caer por las escaleras. Una vez abajo encendí la luz de la sala y visualicé los calmantes en la mesita de té junto al teléfono y mi móvil. ¿Qué hacía ahí? Ni idea, me lo habría dejado. Lo cogí junto a la caja del medicamento y fui a la cocina a por un vaso de agua para que se lo tomara.

- ¿Quieres que me quede contigo otra vez?
- No hace falta- respondió después de tomarse la pastilla- vete a dormir.
- No me importa, de verdad.
- Duerme. No me gusta sentirme así. Puedo valerme por mi mismo. No es que no quiera que me ayudes. Pero me siento inútil. Me cuidas demasiado. Que te lo agradezco un montón, de verdad. Pero no quiero que pases tanto tiempo pendiente de mí, tú tienes tu vida.
- Si quieres lo haré, pero recuerda que si necesitas algo me tienes para lo que sea. Porque tengo mi vida, pero tú también estás dentro de ella.
Él me abrazó y después de darme un beso en la mejilla, le di uno en la frente, y volví a mi habitación.

Cuando llegué miré el mensaje que marcaba la luz del móvil. Era de Sandra. "Ya es oficialmente viernes. Solo quedan tres días. Tengo ganas de volver a Londres"

Los días siguientes pasaron rápido, Vicky estuvo en casa buena parte del tiempo con Fran y el domingo lo pasé con Nico y Twenty Twenty en casa de esta en la piscina. No me fui demasiado lejos, todo hay que decirse. 

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~♫♪~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Llamaron a la puerta, supuse que sería Irene pero al abrir me encontré con otra persona.
- Eh, no os esperaba- les dije- Pasad, pasad. Irene vendrá en nada supongo.
Sam entró después de darme un beso en la mejilla y después me lancé a los brazos de Jack para besarle. 
- Nos ha invitado Sonny- me explicó.
- Pues nada, bien recibidos sois.
- Solo faltaría- dijo riendo. Todavía estábamos en el umbral de la puerta, estaba a punto de cerrarla cuando oí a alguien gritar.
- ¡Espera Nico, no cierres!
Miré hacia ambos lados de la calle pero no vi a nadie. Entonces me fijé en la castaña que estaba cerrando la puerta de la casa de delante.
- Si no traes invitación no puedes entrar- le dijo Jack.
- Tu novia me invitó- se quejó ella después de cruzar la calle.
- ¿Y el papel con la invitación?
- Va Jack, ¿hacemos una excepción y la dejamos entrar?- dije yo divertida.
- No sé, no sé, ¿y si es una fan disfrazada de Irene?
- ¿Esto te sirve?- dijo ella mostrándonos su móvil con el mensaje que yo le había mandado.
- Bueno, supongo- dijo Jack abatido puesto que no se lo esperaba. 
- Gracias- dijo ella riendo mientras se abría paso cual diva entre nosotros dos.
Pasamos la mañana en la piscina y tomando el sol. Estábamos Irene y yo en unas hamacas bebiendo zumo mientras tomábamos el sol y los chicos hacían el tonto en la piscina cuando me acordé de algo que hacía bastante que me preocupaba. Liam. Desde ese día no habíamos hablado casi y últimamente ya ni eso. Y tampoco le había visto por aquí.
- ¿Irene, sabes algo de Liam?
- Está con su familia, últimamente se pasa el tiempo que tienen de vacaciones ahí. Esta semana va a estar aquí.
- ¿Pero está bien?
- Si, más o menos. Una amiga mía, Sandra, y él se llevan bastante bien y ella dice que es el mismo, solo que sigue afectado. Y más después de haber dejado a Danielle como la dejó. Creo que evita pasar el tiempo aquí para no encontrarse contigo o ella y que todo se empeore, pero no lo sé.
- Yo es que no se qué hacer, me siento mal.- y de verdad lo sentía- Y no me coge el teléfono. Me gustaría pedirle perdón y seguir siendo amigos por lo menos, pero las veces que he ido a ver si estaba por casa, no está.
- Haremos una cosa, se que esta semana va a estar aquí, Sandra y Lara vienen y queremos darle una sorpresa porque él no sabe nada. Cuando pueda, te llamo y te pasas por ahí ¿vale?
- Muchas gracias Irene, en verdad no me lo merezco, pero gracias.
- No las des, eres mi amiga y quiero ayudarte.
- Oye ¿y tú y Zayn?- le pregunté curiosa. 
- Bien- respondió sin dar más detalles. Algo pasaba.
- ¿Pasa algo?
- No, que va. Hoy se ha ido a pasar una semana con su familia.- pero sabía que esa no era toda la verdad. 
- ¿Vamos a preparar la comida?- pregunté para dejar el tema de momento. 
- Vamos.
Nos pusimos algo para estar por casa y fuimos a preparar la comida. Se había formado un silencio incomodo, y no me gustaba.
- ¿Sabes que si pasa algo puedes contármelo verdad?
- Lo sé, pero no pasa nada, de verdad, no te preocupes. Es que todo esto de Fran me ha dejado tocada. Pero en unos días estaré bien de nuevo.
- ¿Te he dicho alguna vez que mientes fatal?
- No...
- Y...
- Bueno, vale, te lo voy a contar, resulta que...
Pero no terminó la frase, en ese momento un feliz Jack entró a la cocina preguntando si estaba la comida servida. 
Le amaba con todo mi ser, pero en ese momento la mirada asesina que le lancé no lo hubiera demostrado nunca. 
- Si cariño, dile a tu hermano y al mío que te ayuden a parar la mesa. 
Le lancé una mirada a Irene dándole a entender que la conversación no había terminado. Mientras, servía la comida en los platos.
Comimos con tranquilidad aunque con alguna que otra risa y los típicos comentarios de esos chicos. Irene sufrió un poco de esos, ahora sabía cómo me sentía yo, pobrecita.
Cuando acabamos de comer fui con Jack a lavar los platos mientras Sonny y Sam se llevaban a Irene a rastras y la tiraban a la piscina. 
- ¿Eh, en que piensas?- me preguntó Jack sacándome de mis pensamientos.
- En nada- le mentí, hablarle de Liam no me gustaba.
- Puedes contármelo, sea lo que sea- me dijo tomando mi barbilla con una mano para darme un suave beso en los labios. 
- Lo sé...- suspiré.
- ¿Y bien?
- Es Liam, no me gusta que hayamos acabado así.
- Mmm...- no sabía que contestarme- ¿y si vas a verle un día de estos, quedáis y eso?
- Se pasa la mayoría del tiempo en casa de sus padres. Aunque Iri me ha dicho que esta semana estaría por aquí, quizás debería ir a hablar con él.
- Hazlo, no te lo pienses mucho, porque al final no irás.

Lo haría, si. Tenía que hablar con Liam. El problema sería cuando y que le diría.
Pasamos el resto de la tarde en la piscina hasta que quedamos arrugados y cansados. Nos tumbamos los cinco a tomar el sol y me quedé dormida. 
Me despertó Jack dándome un beso, él y Sam ya se iban, e Irene haría lo mismo. Y todavía no había hablado con ella. Habría tiempo, tarde o temprano lo sabría.

Después de que se fueran, la casa quedó silenciosa y vacía. Sonny y yo nos derrumbamos al sofá aburridos.
- ¿Quieres que vayamos al McDonald's a cenar?- me preguntó.
- Lo que sea menos tener que cocinar.
Y eso hicimos, cogimos su coche y fuimos al McDonald's más cercano y aparcamos para entrar.
Sonny pidió un Bigmac porque no le dejé cogerse un menú infantil y yo me pedí un menú con McPollo, patatas fritas y un McFlurry de oreo. Nos sentamos en una de las mesas y empezamos a comer. Cuando ambos nos acabamos nuestras hamburguesas y las patatas, me levanté a pedir nuestros helados y los traje a la mesa.
- Jack me ha dicho que te preocupaba Liam.
- Si, voy a irle a ver un día de estos.
- ¿No está aquí en Londres?
- No, está con su familia en Wolverhampton.
- Nosotros tendríamos que hacer lo mismo un día de estos. ¿Qué te parece si llamamos a mamá y vamos a comer mañana?
- Pues mala idea no sería y nos despejaríamos un poco.

Volvimos a casa, pero era ya tarde para llamar. Fui a mi habitación a ponerme el pijama, me dolía la cabeza y me iría a dormir temprano. Fui al baño a lavarme los dientes cuando me entraron náuseas y acabé en la taza del wáter vomitando.
- Nico, ¿estás bien?- me preguntó Sonny al otro lado de la puerta.
- Si, si- respondí mientras me lavaba la cara- me habrá sentado algo mal. Pero ya estoy mejor- le dije saliendo del baño.
Me dio un beso en la mejilla y volvió a su habitación a ponerse los pantalones del pijama. 
- ¿Nico, mañana es martes?- me preguntó Sonny desde la habitación.
- No, es Lunes 5. 
- Vale, pensaba que había quedado con Katie mañana.
- Pues no, tranquilo.
Aunque eso me recordó algo a mí. Ya era Agosto. Miré el calendario del móvil mientras volvía al baño a lavarme los dientes de nuevo para sacarme ese gusto amargo de la boca. 
No podía ser. No. Me senté sobre la taza del wáter mientras marcaba el teléfono. Una semana ya. Y que hubiera vomitado... Las alertas se me habían disparado.
"Cari, ¿qué tal?" Respondió alegremente
- Jack...
"¿Ha pasado algo?" Preguntó esta vez preocupado.
- Tengo un retraso... Debería haberme venido la regla hace una semana...




__________________________________________

Bueno, aquí yo de nuevo por segunda vez en un día, espero que os haya gustado eh :) Porque mañana me voy a París hasta el día 1 y quizás hasta el 3 no pueda subir, y aquí el motivo de subir dos, aunque ahora mismo dudo entre que intriga era peor, si al de antes o la de ahora... los sientooo :)
Vuelvo a repetir, ya aprovecho, para aquella gentecilla nueva, que podéis seguirme en twitter y comentarme por ahí o por aquí abajo y si queréis que os avise, simplemente, decirlo y yo feliz en hacerlo :D
Me despido ya que mañana madrugo.
Muchos besos a tod@s, se os quiere
@LiaLouHaZaNia

Capítulo 32

En el capitulo anterior...

- Bueno, ¿de quien hablabais?
- De Liam- respondí.
- Hace ya bastante que no se pasa por aquí. Echa de menos a su familia.
- Puede que sea eso- dije- pero también puede ser que quiera evitar un encuentro con Nico o Danielle.
- Si la chica de quien estuviera enamorado empezara a salir con otro y yo solo fuera su amigo, yo seguiría como siempre- comentó Harry mirándome a los ojos haciendo que dentro de mi algo sucediera. 
- ¿Incluso si ella supiera que le gustas y que ella antes le hubiera parecido sentir algo hacia ti?- comenté sin quererlo. 
- Incluso con todo eso. Si es mi amiga, prefiero eso y disfrutar y divertirnos como solíamos hacer, antes que perderla.



Harry y yo nos quedamos mirando hasta que Niall cortó el silencio. 
- ¿Nos vamos?
- Si, vamos- respondí cortando el contacto visual.
- Yo conduzco- se ofreció Harry. 
Los tres fuimos hacia el coche del rizado y Niall y yo nos sentamos en la parte de atrás.
Llegamos a Nando's y algunas fans que había por ahí nos pidieron fotos y autógrafos. Si, nos. A mi también, ya era oficialmente la novia de Zayn, la fama empezaba a perseguirme. 
Todo iba muy bien, hasta que empezaron los insultos. Algo a lo que tendría que acostumbrarme, sabía lo que era que le gente tuviera celos de las parejas de sus ídolos, yo había sido fan y conocía a gente que se dedicaba a insultarlas por simples celos, supongo que yo tendría que aguantar lo mismo.
- Vamos pequitas, entremos dentro- me dijo Harry conduciéndome hasta el restaurante. Niall habló con un camarero y nos sentó en una mesa apartada.
- ¿Estás bien?- me preguntó Niall preocupado- esto es lo que quise yo evitar hace tiempo. 
- Si, Niall, estoy bien, no te preocupes, ya supuse que esto pasaría y lo comprendo. Es el precio que tengo que pagar.
- Eh- se quejó Harry- que hemos venido aquí para que te animaras así que no vale ponerse nostálgicos ni tristes ni nada de eso. A sonreír.- me dijo poniendo un dedo a una de las comisuras de mis labios y con el otro hizo lo mismo y luego los levantó forzándome la sonrisa. 
Imaginé lo absurdo de la situación y me reí. 
- Así me gusta.
El camarero vino a pedir que queríamos y después de dejarme aconsejar por Niall y Harry, pedimos y esperamos a que nos lo trajeran.

La cena transcurrió entre risas y más risas. La comida era realmente deliciosa. Zayn me llamó diciéndome que ya había llegado y que ya me echaba de menos. Yo en ese momento no tenía claro que pudiera decir lo mismo.
Con Niall y Harry me lo estaba pasando en grande.
Salimos de Nando's y nos fuimos a dar un paseo cerca del London Eye.
- Oye Irene, lo que estabais hablando antes de Liam. ¿Que habías pensado?
- Por lo que se, desde que Liam dejó a Danielle, ha estado hablando bastante con Sandra. Ella me dijo que está mejor, pero aquí no parece demostrarlo.
- ¿Pero Sandra y Lara no tenian que venir hace unas semanas?- preguntó Niall interrumpiéndome.
- Si, pero con lo de Fran les dije de aplazarlo.
- Y vienen la semana que viene.
- Muy buena deducción querido Hazza.
- De hecho me lo dijo Lara.
- ¿Lara? ¿Cuando has hablado tu con ella?
- Hace unos días.
- Ui ui, Niall que aquí tenemos culebrón- dije yo riendo- ¿y como que hablaste con ella?
- Nada, le pregunté que cuando vendrían. Pensé que ya deberían estar aquí.
- ¿Y como que estás tu tan interesado en que vengan?- preguntó esta vez Niall de forma interesante.
- Bueno... Pues porque lo de Liam y Sandra ya lo había planeado yo. Pero te me has adelantado.
- ¡Ja! Te gané -dije con un exceso de emoción- eres una tortuga.
- ¿Tortuga, me estás llamando a mi tortuga? Ya puedes empezar a correr porque cuando te pille habrá una ración de cosquillas.
- Ups...- dije antes de empezar a correr.
Pero la tortuga fui yo, porque en unos veinte metros Harry ya me había atrapado. Me cogió fuertemente desde detrás y me levantó del suelo.
- ¿Preparada?- me susurró al oído y como consecuencia se me puso la piel de gallina. 
- No, por favor, haré lo que quieras, pero mas cosquillas no. Retiro lo de la tortuga si quieres, eres rápido como un vampiro si lo prefieres, pero no me hagas cosquillas por favor.
- Mmm... ¿Pues sabes que pasa? Que los vampiros muerden.- y sin dejarme ir empezó a darme mordiscos en el brazo derecho.
- Au- me quejé de dolor a la vez que me reía. Harry seguía mordiéndome hasta mi dedo meñique, luego subió por mi hombro, mi cuello, hasta llegar a mis mejillas.- Para, para- me reí- ya basta. He aprendido la lección. Espero que no me hayas dejado marcas.
- Chicos, estáis llamando demasiado la atención- nos advirtió Niall quien estaba haciéndose una foto con unas fans.
- Esta vez te has librado pequitas- me advirtió Harry riendo mientras me soltaba de su agarre. Mi corazón se había disparado y respiraba como si hubiera estado un buen rato corriendo. Miré mi brazo, la primera mordida, una en el hombro, dejaría marca por unos días, todavía me dolía un poco.
- Te has pasado, eres un bruto. Mira. 
- Lo siento, no me he podido controlar. Tienes suerte que no haya sido en el cuello.
- Pero me va a salir un moretón.
- Anda, no exageres.
- Ya veremos, ya. Como Álvaro se entere te hará picadillo.
- No, Álvaro ya no es tu guardaespaldas- mierda, tenía razón. La verdad es que lo había hecho tan bien, había cumplido su promesa de no dejarse notar, que no había notado su ausencia.
- Da igual. Me has hecho daño.
- Anda ven- dijo cogiendome la mano y acercándome a él. Luego depositó un suave beso en mi hombro haciendo que el vello de mi espalda se erizara como si un corriente eléctrico la hubiera recorrido de arriba a abajo, dándome un escalofrío que me hizo estremecer.
- ¿Tienes frío?- preguntó.
- Hace un poco de aire. Pero estoy bien.
- Venga, vamos a rescatar a Niall de las fans- me dijo pasando un brazo por mis hombros.
- ¡Ei!¿Tu eres Irene?- me preguntó una de las chicas que hablaba con Niall. 
- Si, la misma.
- ¿Y donde está Zayn?
- Se ha ido unos días. Yo me he quedado cuidando de estos dos. 
- En realidad nosotros la cuidamos a ella- les dijo Harry.
- Sabes Irene, tu y Zayn hacéis muy buena pareja. Me alegra un montón que una Directioner haya conseguido su sueño.
- Muchas gracias- le agradecí.
- ¿Podemos hacernos una foto contigo?- me preguntó su amiga.
- Por supuesto- respondí sonriendo- ¿Niall nos la haces? Esperad que me pongo en medio de las dos.
Sonreí para la cámara y Niall tomó la foto.
- Oye Irene, tu que eres Directioner y eso, ¿has tenido favorito alguna vez?
- La verdad es que siempre me han gustado todos, pero he tenido épocas de debilidades. El primero fue Harry- dije mirándole y vi como en sus ojos se producía un brillo extraño, como de emoción- después fue la temporada Louis, cuando llegué aquí tuve una temporada Liam, después fue Niall y ahora bueno, lo mejor para el final supongo. Si es que todavía no me puedo creer que esté saliendo con Zayn.
- Wow, vas pasando por todos ¿no- se rió- yo también tuve mis épocas de cada uno, y luego volví a empezar. 
- Si, supongo que a mi también me pasa eso- suspiré, era muy probable, si seguíamos el orden, después de Zayn, empezaba de nuevo por Harry- bueno chicas nos tenemos que ir ya. Un placer conoceros.
- El placer es nuestro, no te encuentras cada día a tus ídolos por la calle. Pero antes, ¿nos haces una foto con Harry?
- Claro- les hice la foto con el rizado y después una con él y Niall.
- Irene, no quiero ser pesada, una cosita más, ¿nos puedes seguir en Twitter?
- Si, tranquila, ningún problema. Haber- dije sacando el móvil- dime.- ambas chicas me dijeron sus twitters y las seguí, no me había dado cuenta de que mis seguidores hubieran subido tanto. 
- Wow, Harry, tu también nos has seguido- dijo la chica emocionada- Muchas gracias.
- No hay de que. Y Niall cuando se aclare con los nombres también lo hará- contestó el rizado riéndose del rubio.
Mi móvil empezó a sonar en mis manos, me llamaban. 
- Bueno chicas, gracias por todo. Nos tenemos que ir ya- me despedí antes de descolgar- Hola papá- respondí.
"Cielo, ¿donde estás?"
- Cerca del London Eye. Ya vengo para casa.
"Tengo una sorpresa para ti. Pero si no te das prisa se irá."
- Vale pá, ahora venimos.
"Hasta ahora."
Colgué y les di prisa a Harry y Niall. Llegamos al coche, ya estaba impaciente por saber que era la sorpresa. Harry me dejó en casa, y le di las llaves de mi Vespa a Niall para que me la trajera cuando pudiera puesto que se había quedado aparcada en su casa.
Bajé del coche después de despedirme con dos besos a Niall y fui hacia la ventanilla del conductor para hacer lo mismo con Harry.
Si alguna vez lo habéis hecho, conoceréis el problema del poco espacio de movimiento que permite la ventanilla, eso fue lo que causó algo que no hubiera deseado, el beso se desvió y los labios de Harry se acercaron peligrosamente para juntarse con la comisura de los míos.
Hicimos como si nada hubiera pasado, pero mi estomago decía lo contrario. Me dirigí rápidamente hacia a casa y vi como Harry y Niall se alejaban en el coche.
Y entonces, frente a la puerta de casa me descubrí a mi misma mordiendome el labio a la vez que tocaba con la yema de mi dedo índice justo la parte donde mis labios habían tocado los de Harry, ese trozo donde ahora sentía como un cosquilleo agradable. Y eso no podía significar nada bueno.
Aparté esos pensamientos de la cabeza para sumirme en otros. La última vez que mis padres me habían llamado con una sorpresa... La noche no había terminado bien. Y entonces el miedo me recorrió de arriba a bajo mientras introducía las llaves en la cerradura de la puerta.



_________________________________

 Bueno, bueno, aquí vuelvo yo con mis finales intrigantes, si es que no puedo evitarlo jajaja
¿Que es lo que sus padres quieren decirle?¿Y que le está pasando a Irene con Harry, está volviendo su debilidad por el rizado?
Ya veréis ya...
Ahora, una buena noticia ¿queréis saber la respuesta a la primera pregunta al menos? Si, seguro que sí... Pues bien, no vais a tener que esperar demasiado porque hoy haré una subida especial y esta tarde/noche voy a subir el siguiente capítulo, para que luego es quejéis de que soy mala eh jajaja
Pues lo dicho, hasta luego :)

martes, 20 de agosto de 2013

Capítulo 31

En el capitulo anterior...

Los tres fuimos hacia fuera y yo fui a dejar la mochila de Zayn que todavía llevaba en la espalda en el asiento del copiloto y me esperé apoyada al coche mientras se despedía de los chicos con un abrazo a cada uno. Luego se acercó donde yo estaba y pusos sus manos en el coche, un brazo en cada uno de mis costados. Y luego nos fundimos en un beso de despedida, iba a echarle de menos, echaría de menos esos besos que me llenaban por dentro y me hacían sentir viva. Pero bueno, era una semana, lo aguantaría, espero. Nos separamos unos segundos para coger aire cuando vi que Niall y Harry todavía estaban ahí. Y algo cambió. El siguiente beso, fue diferente, me costó reaccionar.
Ya hacía mucho que habíamos solucionado lo de yo y Niall, pero Harry... Ese tiempo que había pasado con él... Había sido diferente a antes. 



- Eh, ¿te pasa algo?- me preguntó Zayn preocupado con una mano en mi mejilla y mirándome fijamente a los ojos.
- No, nada- respondí desviando la mirada- solo que todavía no te has ido y ya te echo de menos.
- Te quiero, recuérdalo- dijo dándome un ultimo beso fugaz. Y separándose para irse a sentar en el coche. Cerró la puerta y bajó la ventanilla tras encender el motor. 
- Yo también te quiero. Ve con cuidado.- le dije antes de agacharme para introducir mi cabeza por la ventana para darle otro beso. 
- Te llamo cuando llegue.
- Estaré esperando.
Nos dimos otro beso y se fue alejando. Y a medida que el coche se alejaba un vacío se iba formando dentro de mí. Mientras la inquietud hacía lo mismo. Alguien me cogió de la mano al cabo de unos minutos y me arrastró a casa. Me había quedado quieta aunque el coche ya no se visualizara.
- Eh, ¿pequitas estás bien?- dijo Harry poniéndose delante de mi a escasos centímetros de mi cara. Y me perdí en sus ojos verdes, esos ojos preciosos como dos esmeraldas.- Tierra llamando a Irene, Tierra llamando a Irene- dijo haciendo muecas. Yo salí de mi trance y sonreí- me estabas empezando a asustar. 
- ¿Queréis ir a cenar a Nando's?- preguntó Niall.
- Por mi perfecto- dijo el rizado- no tengo ganas de preparar la cena.
- ¿Me mataréis si os digo que llevo no se cuando ya aquí y todavía no he ido a comer a un Nando's?
- No, no te mataremos- dijo Harry- pero te vamos a torturar a cosquillas.
Y él y Niall se lanzaron al ataque pero pude escabullirme y me fui detrás del sofá.
Tenía el sofá en medio, y al otro lado estaban Harry y Niall. Si ellos venian por la derecha yo iba hacia el otro lado, si era por la izquierda, lo mismo y así dábamos vueltas al sofá. Después de unas cuantas paramos unos segundos recuperando el aliento de correr mientras reíamos. Solo que yo no había calculado eso.
- ¡Ahora Harry!- gritó Niall mientras él y Harry se separaban y cada uno iba hacia un lado. Tras de mi había una mesita de te y delante el sofá, no tenía escapatoria. Me tiré al sofá y me tapé con unos cojines. Pero de poco sirvió, me acorralaron y empezó el ataque de las cosquillas. 

Reír a carcajadas, hacer el loco, divertirse a lo grande. Hacía tanto que no lo hacía que ya casi se me había olvidado esa agradable sensación. 
Esos eran los chicos que, incluso antes de que los conociera, conseguían sacarme una sonrisa hasta en el peor de los momentos. 


- ¿Que tal te ha ido la reabilitación?- pregunté a Fran por teléfono.
"Bien. ¿Tu donde estás?"
- Estoy en casa de los chicos. ¿Han vuelto ya papá y mamá?
"Si, han llegado diez minutos después de mi"
- Diles que no voy a venir a cenar. Me voy con Harry y Niall a cenar en Nando's.
"Ya se lo digo. Diviértete que te lo mereces. Un beso."
- Un beso- colgué y fui a buscar a los chicos que se estaban acabando de vestir- Harry cielo, si te estás vistiendo, cierra la puerta- le dije al pasar por delante de su habitación y viéndole en bóxers, ese chico era hijo de Afrodita, seguro. 
- Como si te importara mucho. 
- Anda, va, acaba de vestirte.- luego me dirigí a la habitación de Niall y llamé a la puerta.
- Adelante.
- Alguien con un poco de cabeza y que cierra la puerta- le dije al entrar. Estaba ya vestido y se estaba poniendo las bambas sentado en la cama. Me senté a su lado y le contemplé- hacía mucho que no pasábamos el tiempo juntos.
- Se echa de menos. Ultimamente estoy con Ashley dándole clases de irlandés.
- Hace bastante que no hablo con ella.
- Se ha ido de vacaciones con su familia a Australia.
- No lo sabía. He estado un mes desconectada del mundo.
- Pero es normal. ¿Como está Fran?
- Bien, se pasa noche con pesadillas y le duele todo, pero ya empieza a estar más animado.
- Un día de estos a ver si me paso por ahí a saludarle. ¿Y tu como estás?
- Preocupada por él, se que ya está aquí pero sigo preocupada. Pero bueno, supongo que es normal. Después de estar un mes desaparecido, tengo miedo de volver a perderlo.
- Bueno, pues hoy toca animarse eh. Que desde que Zayn se ha ido que estás mas apagada.
- Es lo que tiene estar enamorado.
- No sabes lo que me alegro por vosotros. Zayn hacía bastante que no era el mismo, desde que está contigo que ha vuelto en si.
- A mi quien me preocupa ahora es Liam.
- A mi también, ultimamente cuando tenemos libre se va a casa en lugar de quedarse aquí con nosotros. Durante los conciertos y todo es el mismo pero al llegar a Londres de nuevo, evita pasar el tiempo por aquí.
- Tengo una idea. Necesito que la semana que viene esté aquí. 
- ¿Quien tiene que estar aquí la semana que viene?- preguntó Harry apareciendo por la puerta.
- Y a ti que te importa, serás cotillo.
- Eh, que te echo de mi casa eh.
- Yo sigo aquí y sigo teniendo autoridad- le contestó Niall pasándome un brazo por los hombros.
- Bueno, ¿de quien hablabais?
- De Liam- respondí.
- Hace ya bastante que no se pasa por aquí. Echa de menos a su familia.
- Puede que sea eso- dije- pero también puede ser que quiera evitar un encuentro con Nico o Danielle.
- Si la chica de quien estuviera enamorado empezara a salir con otro y yo solo fuera su amigo, yo seguiría como siempre- comentó Harry mirándome a los ojos haciendo que dentro de mi algo sucediera. 
- ¿Incluso si ella supiera que le gustas y que ella antes le hubiera parecido sentir algo hacia ti?- comenté sin quererlo. 
- Incluso con todo eso. Si es mi amiga, prefiero eso y disfrutar y divertirnos como solíamos hacer, antes que perderla.


_____________________________

Y con este final de los míos que me encantan me despido por hoy. ¿Que os ha parecido? ¿Que planea Irene para necesitar que Liam venga? ¿Que le pasa ahora con Harry? Ya lo veréis ya...
Se os quiere
Besos <3


jueves, 15 de agosto de 2013

Capítulo 30

En el capítulo anterior...

Fran iba mirando al suelo, vigilando de no tropezar. Estaban a un par de metros de mí y levantó la cabeza para mirarme de una forma que muy pocas veces le había visto hacer, tan pocas que podría contarlas con una sola mano. 
Las lágrimas empezaron a brotar de nuevo haciendo mi visión borrosa, entonces extendí los brazos y nos fundimos en un abrazo. Un abrazo como nunca nos habíamos dado. Y es que quizás me peleaba con él constantemente, pero era mi hermano y le quería como a nadie en el mundo.
- Te quiero enano- sollocé hundiendo mi cara en su cuello, olía muy mal, pero en ese momento no me importaba, aunque fuera camuflado, era el olor de mi hermano, ese olor que había estado persiguiendo durante semanas, el olor que me hacía querer seguir adelante y no perder la esperanza.
- Te he echado mucho de menos- susurró mientras sentía como mi espalda se mojaba poco a poco. 
- No llores, tu eres fuerte- le sonreí separándome un poco para mirarle y darle un beso en la mejilla. 
- He pasado mucho miedo- dijo rompiendo a llorar y volviéndome a abrazar. 
- Shh... Ya está pequeño, ya estás en casa. 



Me desperté repentinamente, tenía el corazón acelerado, me calmé al ver al chico que estaba a mi lado. Si, estaba ahí abrazándome. 
Acaricié su pelo suavemente antes de depositar un beso en su mejilla y la frente. Me levanté con cuidado de no despertarle, había pasado una mala noche, y bajé a preparar el desayuno. Eran las once y media de la mañana. Mis padres se habían ido hacía ya varias horas. Preparé dos cuencos y los llené de cereales con leche. Cogí dos cucharas, un par de servilletas y lo puse en una bandeja que subí arriba. 
- Despierta- susurré.
- Mmm...- gimió.
- Te he traído el desayuno- se levantó de golpe al oír que era yo.
- Buenos días. 
- Buenos días- contesté sonriendo. 
- Eres la mejor. 
- Te quiero. Venga, vamos a almorzar. 
- Seguro que está delicioso. 
Dejé la bandeja sobre su regazo y me senté a su lado en la cama. 
- Siento... Lo de esta noche- dijo avergonzado mientras devoraba el desayuno.
- No te preocupes. Es lo mínimo que podía hacer. ¿Como has dormido a parte de las pesadillas?
- Me duele todo el cuerpo. Pero dormir doce horas y en una cama es un lujo después de un mes sin poder dormir apenas y en un establo apestoso, asqueroso y sin luz.

Lo abracé, lo abracé con todas mis fuerzas, era lo que necesitaba en ese momento, necesitaba tenerlo ahí después de mucho tiempo, abrazarlo fuertemente para saber que no iba a irse, que no volvería a desaparecer.
Dejé de apretarlo cuando se quejó, tenía el cuerpo magullado, lleno de heridas y moretones. Bañarlo ayer fue horrible, quitarle toda la suciedad y el barro y estiércol seco e incrustado en su piel. Limpiar todas esas heridas que había que frotar fuertemente si o si. Lo pasé muy mal viéndole sufrir e incluso llorar de dolor. 
- Lo siento. 
- No te preocupes. Gracias, era lo que necesitaba. Fuiste la única que se calló las palabras inútiles, la única que en lugar de decirme palabras de consuelo, no dijo nada y me abrazó, eso es lo que realmente necesitaba. Eres la mejor hermana del mundo. Te quiero. 
- Yo también te quiero Fran. No sabes todo lo que llegué a echarte de menos. Quise disimularlo todo lo posible, no quise parecer destrozada, no quería que la gente sufriera por mi. Me pasé los días intentando hacer cualquier cosa para quitarme de la cabeza que cuando llegara a casa tu no estarías. Pero cuando legaba y volvía a la realidad, lo único que conseguía hacer era tumbarme en tu cama y llorar hasta dormirme. 
Entonces fue él el que me abrazó después de secarme las lagrimas con el pulgar.
- Ya está enana, ya estoy aquí ¿vale? Y no me volveré a ir. Te lo prometo.


- Lo siento Zayn- dije por teléfono- esta tarde voy a acompañar a Fran al hospital.
- Vero, ve con Zayn- me dijo Fran quien estaba comiendo los macarrones, sentado con la pierna enyesada en un taburete- de verdad, no me importa. Ya has hecho por mi mas de lo que deberías.
- Quiero acompañarte Fran, te lo digo en serio, no voy a dejarte solo.
- Puede venir otra gente si eso te preocupa. 
- No es eso...
- Hacemos una cosa, si no encuentro a alguien que me acompañe, vienes conmigo. Pero si sé de alguien que me acompaña, te vas con Zayn.
- De acuerdo- acepté- ¿Zayn lo has escuchado?
"Si, estoy de acuerdo. Ya me dirás ¿vale?"
- Claro.
"Adiós, te quiero"
- Yo también a ti.

Colgué cuando llamaron a la puerta.
- ¿Quien será?- preguntó Fran.
- Voy a abrir. 
- Tranquila que de aquí no me muevo- dijo riendo señalando su pierna enyesada. Me hacía feliz verle alegre de nuevo, me hacia muy feliz. 
Fui a la puerta y abrí. Fuera dos chicos idénticos esperaban.
- Creo que nos hemos equivocado James.
- Si, Step, veníamos a ver a un tonto desaparecido y nos aparece una chica guapa en la puerta.- dijo el otro a lo que me reí. 
- Para tontos ya estáis vosotros. Anda pasad, Fran está dentro. 
Ambos pasaron por mi lado y me dieron un beso en la mejilla cada uno. Les guié hasta el comedor donde estaba Fran en el mismo sitio que lo había dejado. 
- Hey chicos- dijo mi hermano visiblemente impresionado- ¿que hacéis aquí?
- ¿Creías que te ibas a librar de nosotros tan fácilmente?
- ¿Pero no estabais de vacaciones en Alemania?
- Volvimos hace una semana. Y nos enteramos de esto. ¿Como estás?
- Pues bastante bien. Tengo que ir a rehabilitación casi cada día, pero bueno, se tendrá que aguantar.
- Hospital, enfermeras guapas- dijo Stephan. 
- Nos apuntamos- acabó James después de mirar a su gemelo.
- Mira Iri, ni se lo he tenido que pedir. Ya puedes ir llamando a tu novio.
- Por dios, eres de lo que no hay eh. 
- Un trato es un trato. 
- Tu ganas esta vez.  Bueno chicos os dejo solos un momento, no lo rompáis más por favor. 
Fui a mi habitación y cogí el móvil que estaba en el escritorio. Me senté en la silla giratoria y empecé a dar vueltas mientras esperaba respuesta.
"Cari, lo siento" fue lo primero que me dijo Zayn. "Me ha llamado mi madre por si podía ir a pasar unas semanas en Bradford. Y me voy en un rato que tengo ganas de verles."
- Eh, no te preocupes, ve, lo entiendo. ¿Estás en casa todavía?
"Si, cuando acabe de hacer la maleta me voy, tardaré una media hora o tres cuartos mas o menos."
- ¿Y hay alguien mas por ahí?
"Están Harry y Niall aburridos en el sofá viendo una peli, Lou se acaba de ir con Eleanor."
- Vale, no te entretengo más. Adiós, te quiero.
"Te quiero."
Mientras iba hablando me había puesto unas sandálias y había llenado el bolso con el monedero, y alguna cosa más. Metí el móvil en este y bajé al salón. 
- ¿Chicos habéis venido con el coche?
- Si, está fuera aparcado, ya llevamos nosotros a Fran y luego lo traemos sano y salvo a casa. 
- Si queréis ya voy yo con él, que ...
- Te puedes ir ya- me cortó mi hermano- estaré bien, te lo prometo. 
- Vete tranquila, está en buenas manos- me aseguró James fingiendo estar serio e intentando que no se le escapara la risa. 
- Si de vosotros tengo que fiarme...
- Vete- insistió mi hermano.
- Vale, me voy que aquí nadie me quiere.- que bien se me daba el dramatismo. Le di un beso en la mejilla a mi hermano y salí de casa guardando las llaves en el bolso y cogiendo las de la moto. Abrí el garaje y ahí estaba mi querida Vespa. 
Puse las llaves y en unos segundos ya volvía a sentir el motor. Me puse mi casco y la llevé andando hasta fuera, cerré el garaje y me subí. 
Di gas y empecé a recorrer las calles londinenses. Al fin me sentía libre. 

Llegué en diez minutos a mi destino. Llamé al timbre y el rizado me abrió. En apenas un segundo dejé de tocar el suelo mientras me achuchaba en un abrazo reconfortante, luego me dio un beso en la mejilla y me dejó en el suelo de nuevo. 
- No sabes como se te ha echado de menos. Llevas casi un mes que ni respondías cuando te llamaba. Estaba preocupado por ti. 
- Lo sé, lo siento Harry. Pero llegó un momento que quise desconectar del mundo, ya no sabía que hacer.
- Has tenido suerte de tener a Zayn. Él me fue informando un poco de como estabas. Nosotros cuatro decidimos que era mejor no ir a verte para no estresarte más, Zayn nos dijo que preferías estar sola.
- Gracias por preocuparos. Pero ahora la Irene de siempre ha vuelto. 
- Venga no nos vamos a quedar todo el día en la puerta, pasa.
- Venía a ver a Zayn antes de que se fuera.
- Oh... Claro... Zayn...
Entramos dentro de la casa. 
- ¡Pececillo!- gritó Niall emocionado al verme. Se levantó y vino a darme dos besos.
- No es pececillo, es pequitas- le corrijo Harry.
- No, pececillo va mas con ella.
- Pero si sus pecas son adorables- yo me sonrojé.
Les dejé en su discusión sin que se dieran cuenta y subí a la habitación de Zayn. Al entrar, el recuerdo de mi charla con Vero vino como un flash a mi mente, todavía no le había dicho nada seguro.
Salí de mis pensamientos y me fijé en el chico que estaba de espaldas a mi poniendo cosas en la maleta que se encontraba sobre su cama. Me acerqué sigilosamente y le tapé los ojos con las manos.
- ¿Quien eres?- preguntó. No pude evitar que una risita se me escapara- Aja...
Me cogió las manos y se destapó los ojos. Luego se giró y me besó mientras yo correspondía.
Iba a echar de menos sus besos durante unos días así que disfruté de ellos todo lo que pude ese rato.
- ¿Que haces aquí?- me preguntó separándose- no te esperaba.
- Por algo iba a ser una sorpresa. Quería despedirme de ti antes de que te fueras. Te voy a echar de menos.
- Si quieres me quedo aquí.
- No. Es tu familia, seguro que ellos te echan mas de menos que yo.
- Yo también te echaré de menos a ti. Pero solo será una semana. 
- Tengo una semana para serte infiel, perfecto- comenté de broma mientras reía.
- Serás tontita- se rió antes de besarme de nuevo.
- ¿Te ayudo con esto?- le pregunté cuando nos hubimos separado- ya te he entretenido lo suficiente.
- Tu nunca me entretienes, me alegras los días, y haces que todo se detenga y pueda disfrutarlo contigo.
- Oixx no me digas estas cosas que me enamoras- dije dándole un beso. Él sonrió de lado, por dios adoraba esa sonrisa. 
- Venga va, que esto ya está- le dije cuando terminamos, aunque no quería que se fuera todavía.
Le ayudé con la mochila mientras él bajaba su maleta y la fue a llevar al coche. Niall y Harry todavía mantenían la misma discusión, me paré a su lado como si no me hubiera ido, y Zayn volvió, se puso tras de mi y me rodeó con los brazos.
- Chicos, ¿de que discutís?- preguntó el moreno sin entender.
- Sobre que es mejor pequitas que pececillo- dijo Harry.
- ¿A que pececillo le queda mejor?- continuó el irlandés.
- ¿Os referís a Iri?
- Si- respondieron ambos.
- Pues yo le llamo Sirenita, es mejor.
- Alaaa, donde vas- se quejó Niall.
- Si incluso el pececillo de Niall queda mejor.
- Pero no la veis, si es como una sirena, media vida la pasa en el agua y es guapa, lo tiene todo.
- Bueno, en esto no te lo podemos discutir- dijo Harry- pero es que esas pequitas en la cara la hacen hermosa.
- Ni que tuvierais tres años, sois como críos- dije intentando parecer seria. Pero la discusión tenía su punto divertido- los tres están bien ¿vale? Cada uno que me llame como quiera y todos felices.
Eso pareció convencerlos porque la discusión finalizó.
- Bueno, yo me tengo que ir ya- dijo Zayn. 
Los tres fuimos hacia fuera y yo fui a dejar la mochila de Zayn que todavía llevaba en la espalda en el asiento del copiloto y me esperé apoyada al coche mientras se despedía de los chicos con un abrazo a cada uno. Luego se acercó donde yo estaba y pusos sus manos en el coche, un brazo en cada uno de mis costados. Y luego nos fundimos en un beso de despedida, iba a echarle de menos, echaría de menos esos besos que me llenaban por dentro y me hacían sentir viva. Pero bueno, era una semana, lo aguantaría, espero. Nos separamos unos segundos para coger aire cuando vi que Niall y Harry todavía estaban ahí. Y algo cambió. El siguiente beso, fue diferente, me costó reaccionar.
Ya hacía mucho que habíamos solucionado lo de yo y Niall, pero Harry... Ese tiempo que había pasado con él... Había sido diferente a antes. 


____________________________

Y aquí yo de nuevo con el capítulo 30 ya y casi tengo hasta el 40 escrito así que todavía queda para acabar. ¿Que os ha parecido el capitulo? ¿Cual mote es el que más os gusta, Liam y Louis también deberían tener uno no? Se aceptan sugerencias. 
Espero que os haya gustado el capitulo porque teoricamente, el siguiente lo subiré (se va a mirar un calendario) el martes o el miercoles y el siguiente, con suerte lo subo el 25 antes de irme a París.
Se podría decir que hoy comienzo las vacaciones que me voy al pueblo, aunque hasta el 25 no creo que lo considere yo vacaciones de verdad  porque me va a tocar trabajar, pero bueno, no me enrollo más. Todo esto a que en el pueblo no hay cobertura y no se si lo podré subir el martes, pero ya encontraré la manera, no os preocupéis. 
Beeesos <3
Aina